Nací en Logroño y crecí viendo cómo niños, niñas y jóvenes entraban y salían con sus instrumentos del conservatorio, situado justo enfrente de mi casa. Como era de esperar, 7 años más tarde acabé con un violín en las manos y comenzando en el increíble mundo de la música.
Desde entonces, he dedicado gran parte de mi vida a desarrollarme como músico, como violinista y como persona. Son innumerables las historias que puedo contar sobre los increíbles viajes, los conciertos, las grandes personas que he podido conocer y las emociones que he podido sentir y he tratado de transmitir gracias al violín.
Durante los años en los que estudié el grado elemental y profesional en Logroño y el grado superior en el CSMA de Zaragoza, tuve el placer y el honor de recibir clase de grandes maestros, de entre los cuales me gustaría destacar a mis profesores de violín, Abel Urzanqui y Jordán Tejedor, quienes me enseñaron que un profesor debe dar al alumno las herramientas necesarias para que pueda construir su forma de tocar (esto es, fundamentalmente, enseñar toda la técnica del violín y, a partir de ahí dejar que el alumno se exprese libremente), algo que trato de transmitir en mis clases; y a los componentes del cuarteto Quiroga (Aitor Hevia, Cibrán Sierra, Josep Puchades y Helena Poggio), grandes músicos y pedagogos con los que aprendí todo lo que se puede aprender en cuanto a tocar en grupo se refiere. Ellos afirmaban que un cuarteto de cuerda no eran dos violines, una viola y un violonchelo, sino que se trataba de fundirse en un solo instrumento, con una sonoridad propia. Además, también aprendí de ellos que el mejor intérprete no es el que menos notas falla, sino el que más consigue conectar con el público y transmitir los sentimientos y las emociones que está experimentando mientras toca. Gracias a sus enseñanzas pude vivir una de las mejores experiencias de mi carrera, como fue participar y ser finalista del Concurso de Juventudes Musicales de España en mayo de 2019 con el trío Itten.
En cuanto a mi trayectoria profesional, he tenido el placer de tocar con numerosas orquestas como la Orquesta Ciudad de Pamplona, la Orquesta Reino de Aragón o la European Youth Orquestra de Darmstadt entre otras, con distintas agrupaciones, con grupos de pop y música indie, y más recientemente he realizado un Máster en Interpretación de Violín e Investigación Performativa en la Universidad Alfonso X El Sabio de Madrid.
A pesar de todo ello, considero que la música es una carrera de fondo y que por muchos años que pasen, sigo aprendiendo cada día un poco más, no solo de maestro, maestras, compañeras y compañeros, sino también de mis propios alumnos y alumnas.
